“Del punto de vista científico, todo el sistema solar nació del Sol. La Luna, Marte, Júpiter y todos los otros planetas, incluyendo esta Tierra, son todos partes orgánicas del Sol. Lentamente la vida brotó en la Tierra - de las plantas al hombre. El hombre es una parte orgánica de la Tierra que es parte orgánica del Sol

Es como una madre que tiene una hija que a su vez tiene una hija y en las tres fluye la misma sangre. Sus cuerpos están hechos de células similares. Los científicos usan la palabra "empatía" para significar la sensibilidad compartida. Estas cosas que nacieron de la misma fuente poseen un tipo de experiencia interior compartida.Todo lo que ocurre en el Sol crea una vibración en cada célula de nuestros cuerpos. Tiene que ser de esa forma porque nuestras células nacieron del Sol. El Sol parece estar a una gran distancia sin embargo, no está tan lejos. En todo elemento de nuestra sangre y en cada partícula de nuestros huesos viven los átomos del Sol, somos parte del Sol y, así, no es de extrañar que nuestras vidas estén influenciadas por él.Existe una especie de empatía entre el Sol y nosotros. Si entendemos correctamente esta empatía, podemos penetrar en una dimensión de la astrología. La conciencia o percepción de algo no es imprescindible para que eso exista.
La astrología dice que hay campos de energía alrededor de nosotros que continúan influenciándonos permanentemente. Así que un niño nace, está sujeto a todas la influencias del mundo. En el lenguaje científico, podemos describir el nacimiento como un proceso de exposición.
Es exactamente como si expusiéramos la película de una cámara. Presionas el botón de exposición de la cámara e, instantáneamente, las ventanas de las lentes se abren y cierran y todo lo que estaba delante de la cámara queda automáticamente registrado en la película. La película es expuesta sin afectar la exposición anterior. La película capturó la imagen de la escena para siempre.
Del mismo modo, cuando un niño es concebido en el útero materno, esa es su primera exposición. El día que nace ocurre la segunda exposición. Esas dos exposiciones son registradas en la mente sensitiva del pequeño como en la película. El mundo como es en aquel momento se imprime en el niño y de esta manera hay una empatía del niño con el mundo tal cual es en aquel momento.
El nombre de esa relación cósmica interconectada es astrología. El significado y la esencia de la astrología es de que no estamos separados, somos uno con el universo. No solamente el ayer, sino también el mañana; no solamente lo que ya llegó, sino también lo que esta viniendo; no solamente el Sol que surgió hoy, sino también el Sol que surgirá mañana - todos son participantes.
El ayer me hizo y el mañana también hizo: eso es astrología. Los momentos futuros también determinan el momento presente. Este momento presente podría no existir si no hubiera momentos futuros. Una vez que alguien se descubra conectado con esa unidad interior del pasado y del futuro, ese alguien estará capacitado para entender la astrología... De este modo, la astrología se vuelve espiritualidad"”
– Osho
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